Con el AEGAON Tabula Rasa nos adentramos en el mundo de los relojes sólidos y contundentes. Hoy repetimos con una pieza que aunque coincide en diámetro con él, no tienen nada en común, el OceanX Sharkmaster 1000.
OceanX fundada en Hong Kong en 2017 surge de la mano del antiguo propietario de ANCON Watches, de modo que no es que empiecen de cero precisamente. Es una de esas nuevas micromarcas que llama la atención apostando por los modelos extremos, y que rápidamente se han labrado una buena reputación gracias a ofrecer buena calidad a precios comedidos. Entre los modelos que ofrecen, el más espectacular de todos es el Sharkmaster 1000, un reloj que adopta esta denominación, porque ofrece un impresionante hermetismo. Es resistente al agua 1000M, o lo que es lo mismo: 100 ATM / 100 BAR (3.300 pies).
Por su apariencia, todos resultaban ser relojes que llamaban la atención, aunque tras mirar y remirar su web, al final mis favoritos fueron el SMS1073 serie limitada, todo negro con manecillas y numerales amarillos y correa de silicona; el SMS1032 serie limitada, esfera degradada azul, y bisel con insertos de carbono, SMS1014 con esfera azul y bisel de insertos cerámicos; y finalmente el el SMS1012 con la esfera degradada azul, y el bisel con insertos cerámicos que fue el escogido. El precio de esta versión es 470$ (unos 422€ al cambio), a los que probablemente haya que sumar aduanas y que lo pondrá en unos 530€. Pero, ¿queréis como conseguirlo por 200€ menos, sin aduanas, y con entrega en sólo 2 días? Pues seguid leyendo, porque esta reseña además de probar a fondo el Sharkmaster 1000, hablará de como comprarlo.
Ficha técnica
Género | Hombres |
Caja | Acero inoxidable 316L. 44mm de diámetro sin contar la corona. 17,5mm de alto |
Corona | Roscada de acero |
Esfera | Azul degradado |
Bisel | Rotativo unidireccional de acero y cerámica |
Cristal | Zafiro abombado |
Lumen | Sí |
Trasera | Roscada de acero inoxidable |
Correa | Armis de acero, de 21mm de ancho |
Funciones | Hora, minutos, segundos, día del mes |
Resistencia al agua | 100 ATM (1000M) |
Peso | N/D |
Movimiento | Seiko SII NH35A. 21.600 vph, 24 rubís |
Complicaciones | Carga automática con rotor bidireccional. Remonte manual. Parada de segundero |
Prestaciones | 41h de reserva de marcha. -20/+40 segundos/día |
Origen | Hong Kong |
Garantía | 2 años |
PVP | 399€ (oferta 359€) |
Distribuidor | OceanX Watch / Relojes con Estilo |
Presentación
Recibimos el reloj en una compacta caja de color negro. La cobertura deslizante no lleva ningún identificador.
Una vez abierta nos encontramos con una caja de cartón bastante simple. Sólo los originales cierres metálicos llaman la atención.
Al abrir esa caja, las cosas cambian bastante, porque por fin contemplamos el reloj
La dotación no es nada especial, un sencillo manual de instrucciones en inglés, que hace las veces de tarjeta de garantía. Hubiera sido interesante imprimir el resultado de la prueba de hermetismo, o cualquier documento sobre las pruebas del reloj, que le habrían añadido un gran interés.
Anteriormente utilizaban una bonita y elegante caja de presentación, demadera en color azabache que el logotipo de OceanX en dorado, lo cual incrementaba la prestancia del producto, que en este caso queda un poco floja.
Diseño y construcción
Las lineas y los detalles, en particular de esta versión SMS1012 se inspiran claramente en el Rolex Deepsea D-blue dial M126660-0002, conocido como «James Cameron». Una bestia de idénticas dimensiones al Sharmaster 1000, pero que ofrece una resistencia al agua casi increíble: 3900M. Claro que si su estanqueidad es casi 4 veces superior a la del Ocean X, su precio lo multiplica por 30 (11.650€).
Dejando de lado que su diseño sea más o menos original, y no olvidemos que en relojes de estilo buceo, todos tienen algo del Rolex Submariner, estamos acostumbrados a relojes homenajes que sólo tienen del homenajeado la estética, el Sharkmaster la tiene, evidentemente, pero también salvando las distancias está a la altura en cuanto a materiales, acabados y funciones. Como decía al principio, es también bastante parecido al Ancon Sea Shadow III Magnum, sólo que mucho más barato, a costa de reducir márgenes y del calibre Seiko NH35 en vez del Miyota 9015.
Suelo comenzar las pruebas de relojes hablando de su caja, con el OceanX Sharkmaster haré una excepción, porque es la esfera su verdadero protagonista. En color degradado horizontal que va del azul hasta el negro, las fotografías que he visto de él no le hacen justicia. Ha sido tan exitoso ese concepto, que ahora la podemos ver también en el Nethuns Scuba 500.
Los índices están aplicados, y van recubiertos de lumen Superluminova C3, al igual que en las manecillas y los numerales del bisel. Su rendimiento es muy bueno, pero sin llegar a los extremos de Seiko o Trigalux. Lo bueno que como hay tanta superficie con Superluminova aplicada los resultados en penumbra y oscuridad son espectaculares. Las agujas son las de tipo Mercedes, características del Rolex Sub y la mayoría de relojes de buceo. El contorno es plateado.
El bisel es cerámico negro, rotativo unidireccionalmente y de 120 clics. La cerámica es uno de los mejores materiales para un bisel, puesto que es muy resistente al uso y difícil de rayar. No llega a la altura del SMS1032 con su bisel de fibra de carbono, pero casi. En cuanto a mi opinión pienso que si en vez de negro fuera azul como en el SMS1014, o incluso degradado azul-negro a juego con la esfera, el conjunto quedaría más unificado.
El cristal es de zafiro, apenas abombado y con tratamiento anti-reflejos en la cara interna. El zafiro, al resultar irrayable (salvo por el diamante), es lo ideal en cualquier reloj, y más aún en un diver. Lo que no se ve tan a menudo, son grosores de 4,5mm como en el Sharkmaster 1000, obviamente debe ser capaz de resistir presiones enormes, lo que obliga a que sea grueso. Ese es el motivo de su ligera convexidad, no es una decisión estética como en muchos relojes, sino que se debe al grosor en si mismo que tiene. Sin embargo, su transparencia y su legibilidad es muy buena. Sólo se aprecian leves distorsiones o aberraciones en ángulos de visión muy oblícuos. Si no nos dicen que es tan grueso, ni nos daríamos cuenta de ello.
La caja tiene 44mm de diámetro sin contar la corona, es grande pero nada descabellado, ahí tenemos por ejemplo al Orient M-Force, lo que si impresiona son sus 17,5cm de altura, superando incluso al Hanhart Pioneer TwinControl. Es de acero inoxidable de grado quirúrjico 316L, se siente sólida y no hay ninguna pega en cuanto a sus acabados. Como la longitud entre asas es de «solamente» 51,9mm, el reloj no parece tan grande en la muñeca, no desentona con mis 17,5cm de perímetro. La corona es roscada como es lógico en un super-reloj de buceo, y va firmada con el tiburón de Sharmkaster. A las 9 se encuentra la válvula de helio de descarga automática.
El armis o brazalete, es de eslabones macizo, muy sólido y de una calidad buena. De hecho los enlaces van unidos, no con pasadores, sino atornillados para darles más robustez. A las anteriores generaciones de Sharmkaster 1000 se les criticaba que el cierre no estuviera a la altura del armis, y mucho menos del resto del reloj, algo que finalmente han mejorado, aunque podría ser aún más robusto, un cierre de seguridad a presión que va firmado con el logotipo del tiburón.
OceanX no da especificaciones de peso, con mi balanza ha pesado 240g, lo cual es, como cabría esperar, una cifra elevada.
La trasera es de acero inoxidable roscada, y como el cristal, sobredimensionada para resistir sin problemas las elevadas presiones. Según OceanX, nada menos que 3,8mm de grosor, ¡una pasada! Grabado por laser se incluyen los datos imprescindibles en cuanto a especificaciones y marca.
Queda clara que la denominación de Sharkmaster, está muy bien escogida, «Shark» significa tiburón en inglés. Un estudio en Nueva Zelanda que ha colocado chips a tiburones blancos, ha encontrado que uno de ellos, al que cariñosamente apodaron como «Shack», logró descender hasta los 1.200 metros de profundidad. Si Shack tuviera muñecas, llevaría un Sharkmaster 1000.
Movimiento
Parece ser que últimamente la mayoría de marcas independientes están optando exclusivamente por los NH35A de Seiko Instruments Inc (SII) / Time Module Inc (TMI), esencialmente el Seiko 4R35 que se vende como ébauche a marcas de fuera del grupo Seiko. No hay mucho que decir, porque lo vimos con el Stoic World The Pilots Watch y el Rhythm Eternity.
Una maquinaria mecánica de carga automática, con rotor de carga bidireccional, 24 rubís, y que late a 21.600 vph. Cuenta con parada de segundero y posibilidad de remonte manual. No es demasiado refinada, pero sí muy fiable y económica lo que permite mantener los precios ajustados. En cuanto a sus especificaciones (se pueden descargar aquí -1,1 MB. en formato PDF-), ofrecen una reserva de marcha de 41 horas, y una precisión de -20/+40 segundos/día. Sorprende, porque Seiko solía indicar una desviación máxima de -25/+35 segundos/día.
En todo caso, y comparado con los Miyota 8215 que aún montan en modelos de diferentes marcas de Dartmouth Brands, es de agradecer que con el Dumas hayan dado el salto hasta los Seiko NH35, más refinados, suaves y agradables.
Sensaciones
Personalmente me cautiva de este reloj su resistencia al agua de 1000M, lo que supone soportar el peso de una columna de agua de 1 kilómetro de longitud. ¿Os lo estáis imaginando? Sin ayuda externa (SCUBA – Self-Contained Underwater Breathing Apparatus-), el buceador de las fuerzas especiales egipcias Ahmed Gabr logró descender 332,35 metros, logró con esa gesta el récord mundial de profundidad, llevándole el descenso 12 minutos. Me lo imagino adentrándose en la oscuridad del Mar jRojo, casi un cuarto de hora sin parar, y el Sharkmaster 1000, ni siquiera habría llegado a un tercio de su límite. Dándole una vuelta de tuerca, buzos de la marina norteamericana, envueltos con equipos ADS (Atmospheric Diving System), que son esencialmente armazones metálicos presurizados, han logrado superar los 600m. Poco más de la mitad de lo que aguantaría el Sharkmaster.
Un besugo no excedería los 700 metros de profundidad; un atún a como mucho 400 metros, aunque normalmente naden en la franja de 10-20 metros; una merluza a un máximo de 350 metros; una sardina a menos de 100 metros. Los animales acuáticos que han evolucionado para habitar las profundidades acuáticas, son en su mayoría los que se conoce como mesopelágicos, lo hacen a entre 200 y 700 metros donde aunque apenas se filtra luz, aún llega algo. En cualquier caso, más allá de los 8.000 metros, no hay fauna. En el punto oceánico más profundo de nuestro planeta, la Fosa de las Marianas, una pequeña región de la misma logra los 10.911 metros de profundidad.
Incluso si nos vamos a otros planetas, Venus, el planeta con la presión más alta de nuestro sistema solar, y no el gigante gaseoso Júpiter como muchos piensan. Quebraría casi cualquier aparato terrestre que aterrizara en él, tiene una presión atmosférica de 92 ATM / 92 BAR / 9,2 MPa. Equivalente a sumergirse a 920 metros de profundidad en el mar. Demasiado para un ser humano, pero insuficiente para Sharkmaster.
Seamos sinceros, ninguno de nosotros va a sacarle partido a todo ese hermetismo, no lo necesitamos. Pero nos encanta, es como un automóvil que supere los 350 Km/h, nos pone los pelos de punta. Es una exageración y por eso nos atrae tanto. Aunque si lo tuviéramos, pocos de nosotros nos atreveríamos a alcanzar esa velocidad, ni siquiera en una autopista. El Sharkmaster es lo mismo, aunque sin olvidar que esa estanqueidad también nos dará ventajas en cuanto a que no penetren partículas ni polvo al interior del reloj, haciéndolo que sea más duradero.
Cuando lo llevamos no es la panacea de la comodidad, es lógico, y lo mismo le ocurrirá a ese superdeportivo de 350 Km/h circulando por los embotellamientos de una gran ciudad en hora punta. Es su grosor el que lo hace difícil de compatibilizar, no ya con una camisa, sino también con un jersey o hasta un abrigo. El reloj no tardará en salirse de dentro de la manga, buscando su espacio. Entonces nosotros nos sentiremos, aunque sea por un momento, como el egipcio Gabr. El diámetro no es en absoluto incómodo, ni visualmente ni al llevarlo. Quizás lo más sorprendente sea el peso, al que uno se acostumbra rápido.
No debemos dejar de lado sus atributos visuales, la esfera degradada tipo D-blue o la espectacularidad de su lumen que hace que cada vez que miremos la hora, sintamos un pequeño cosquilleo en nuestro cuerpo. Parece el reloj ideal para un día de playa, rodeados de bañistas mirando con curiosidad al OceanX. En cuanto a tamaño, no os asustéis, porque debido al grueso bisel, y la distancia entre asas, no parece mastodóntico en la muñeca, quizás como si de un reloj de 42mm o 43mm se tratara.
Conclusiones
Relojes con Estilo es distribuidor oficial de Ocean X, además de tener otras micromarcas en su catálogo (San Martin, Zelos, Nethuns, Marc&Sons, Trigalux, Smith & Smoorcer, Vostok Europe, Deep Blue o incluso Aviador), tienen todos los modelos de OceanX, la mayoría en stock, por lo que se entregan en 24/48 horas nada más. En mi caso, nada que objetar a ese respecto, al contrario. El pedido me llegó al día siguiente después de realizarlo.
Como envían desde España, y el precio de 359€ es IVA incluído, no hay problemas ni de aduanas, ni de retrasos, y nos ahorramos un buen dinero. A modo comparativo, los también europeos de SeriousWatches en Holanda, lo tienen a 399€. Porque si el OceanX Sharkmaster 1000 SMS1012 es muy competitivo a 359€, a 535€, empieza a dejar de serlo.
Si buscas un reloj contundente, donde todo está sobredimensionado en aras de resistir las exigencias más duras, y con buenos acabados, el OceanX Sharkmaster 1000 es tu opción. De hecho en esa franja de precios, no hay nadie que se acerque a lo que nos da el Sharmkaster. Otra cosa es que nos podamos conformar con algo más sencillo y más barato, como un Orient Mako II o Mako III (Kamasu) y ahorrarnos 100€ o 150€.
Con el uso que le he dado al reloj estos días, no me sorprenden sus buenos comentarios y el éxito de ventas que está cosechando. Tal vez sólo faltaría desplegar un nuevo elenco de versiones con más combinaciones de esferas y de bisel.
▲ Más | ▼ Menos |
Resistencia al agua de 100 ATM Esfera atractiva y original |
Grosor excesivo Presentación escueta |
Yo cada vez que veo un bicharraco de estos de 1000 metros o más, siempre pienso «¿a donde vas con eso haciendo vida terrestre?» Tengo visto en un ECI uno de los Citizen de este estilo, y es que es una brutalidad…
Yo me quedo sin dudarlo en las 10 y 20ATM de estanqueidad… y si bajas a las profundidades, yo espero en la superficie de guardia, chapoteando un poco y con un gintonic largo bien fresquito.
Sobre las especies abisales, están muchas tan adaptadas, que saben los científicos que no podrían ni llegar a estudiarlas a niveles de superficie. Porque en el momento que subiéndolas de nivel de profundidad llegado a cierto momento se destrozarían y deharían por efecto de descompresión. No están sus organismos preparados para la bajísima presión que hay desde centenares de metros hasta la superficie.
Muy buenas a todos.
Madre mía,Guti,pedazo de reloj te has agenciado.Enhorabuena y a disfrutarlo!!
Muy bonito Diver.
En analógicos no estoy muy curtido y entiendo muy poco.Yo en analogico tengo muy pocos.
De Diver,s hace unos meses me pillé un Diver de la marca Phoibos,cuarzo suizo y zafiro de 300m.A un precio muy muy competitivo.
Y va realmente preciso.
El tema de los metros pues,bueno, pienso que a partir de los 300m,ya carece de importancia que sea 600m,1.000m o 3.900m.
Mientras te guste el reloj,sus acabados y prestaciones,es lo importante.
Nadie ha podido bajar a más de 330m y subir con vida.
El último intento de bajar a enormes profundidades fué a 360m,pero no logró subir y se quedó abajo.
Y a 318m bajó en muñeca un Casio Dw-6300.
A mí me gusta también este tipo de relojes, aunque no les saquemos partido real de sus metros.Yo tampoco bajaré nunca a 300m para probar el Phoibos, simplemente me gusta como reloj por su estética y presencia.
Muy guapo Guti!!!
Un bicharraco.
Saludos!
Claro. Racionalmente un WR100M te da todo lo que puedes necesitar día a día, incluso ir al gimnasio o la piscina con él. Con un 200M podemos ir a mayores, realizar alguna actividad acuática profesional. Más que suficiente para la mayoría de personas y por supuesto para mi. Sin embargo Alejandro, esa superioridad técnica y constructiva, ese algo que nunca vamos a llegar a utilizar tiene también mucho encanto, al menos emocionalmente.
Esa es la palabra Pedro, captaste la idea por completo, un bicharraco.
Un Diver muy bonito y contundente, con unos acabados y lumen excelentes para su precio.
Lo que menos me gusta es la leyenda «Helium Escape Valve» (ni en el Rolex homenajeado me gusta).
Lo que me encanta es la foto aérea de A Coruña junto con el reloj ;).
Como ya comenté en otars ocasiones, mi límite está en los 42mm, por lo tanto lo veo grande y alto. Algún día me probaré algo con estas dimensiones porque me llaman la atención, pero mi delgada muñeca de 16,5 cm no creo que lo soporte.
Enhorabuena por la compra Javier.
Saludos.
Realmente tiene muchas concesiones estéticas ManuC que la mayoría perdonan a Rolex por ser Rolex. Una de ellas es la inscripción de Helium Valve en el bisel interior, demasiado exagerada, pero supongo que el ser fiel al «original» es parte de su encanto. Sí puedo decirte que es cuestión de acostumbrarse, mi muñeca es de 17-17,5 y lo llevo sin problemas. De hecho me costó más el Casio GPR-B1000 que este.
Gran analisis! Me encanta con visel verde tipo Hulk y no conocía la marca me ha servido de mucha ayuda gracias!
Gracias por tus palabras y bienvenido Ibon.