De la infancia hasta bien pasada la adolescencia fui un auténtico fanático de la prensa automovilística. Revistas como Automóvil, Top Auto, Autopista, Motor 16, Car & Driver, Coche Actual, e incluso la Guía del comprador de coches entre muchas otras. Me gustaban porque aquellos periodistas y reporteros verdaderamente sentían pasión por la automoción, probaban los vehículos a fondo y sus narraciones transmitían las sensaciones que conducir aquel coche podía proporcionar.
Esa fue mi fuente de inspiración a la hora de escoger un formato para las pruebas de relojes. Opté por comenzarlas con una ficha técnica precedida de una entradilla, las concluí con una tabla de ventajas y desventajas, pero sobre todo con honestidad y transparencia analicé los relojes como ellos lo hacían: llevándolos día a día.
La prensa escrita fue un pez que se mordía la cola. La audiencia bajaba y por tanto lo hacían los ingresos. Empezaron a publicar pruebas que eran notas de prensa o publirreportajes, cosas que no aportaban nada al lector. Con ello menos gente aún las compraba, y más recortes aplicaban… Es un fenómeno extensible a la mayoría de medios actuales, tengan la temática que tengan. No aportan información útil y tampoco ofrecen una lectura que emocione. Esas cualidades parece que ya sólo se encuentran en algunos medios independientes, y cada vez menos…
El caso es que aquellos redactores del motor sentían los coches. Eran capaz de llegarte, tanto si probaban un humilde automóvil de 10.000€ como si probaban un superdeportivo de más de 1 millón. Ya me adentré en eso con el Reloj de un millón de dólares contra reloj de diez dólares, pero hoy quiero dar una visión un poco distinta.
Ocurre que llevaba días en los que el prototipo del Formex REEF Automatic Chronometer COSC 300M no se despegaba de mi muñeca. Hasta que llegó el humilde Casio AE-1500WH. De nuevo me sentí un poco como aquellos probadores de coches de la época. Eran capaces de probar, y disfrutar cualquier tipo de automóvil, sólo que yo lo hacía con relojes.
Naturalmente no podemos juzgar un reloj mecánico de lujo como el Formex de casi 2.000€ bajo los mismos parámetros que valoramos un reloj digital práctico y asequible como el Casio de poco más de 20€. Sería como enfrentar un Lamborghini Aventador a un FIAT 500 para concluir que el Fiat consume menos combustible, tiene mayor autonomía, es más fácil de aparcar u ofrece 4 plazas en vez de sólo 2.
El Fiat 500, o para el caso que nos ocupa el Casio AE-1500 son relojes que se disfrutan de una manera distinta al Formex Reef. Son ligeros, cómodos y baratos, así que podemos hacer deporte con ellos sin ningún miedo, y si se dañan, reemplazarlos. Además, ofrece muchas más funciones y con mayor precisión pese a que el Formex sea un cronómetro.
Sin embargo, a la hora de irnos a dar una vuelta a un circuito, ¿qué coche llevaríamos: el 500 o el «Lambo»? Todos cogeríamos el Lambo, así que cuando lo que quieres es disfrutar de una maquinaria mecánica de máximo nivel, contemplar su técnica, la artesanía de su esfera o el trabajo del bisel la mayoría escogeríamos el Formex.
Concuerdo totalmente con esa filosofía de no enfocarse exclusivamente en un concepto concreto de producto, ya sea en base al precio, calidades, etc., ya que nunca se sabe qué tipo experiencias te puede llegar a reportar una determinada opción según las circunstancias. En este sentido valoro y disfruto con el estilo y formato del blog y sus análisis, siempre además evolucionando en busca de mejoras, ya sean técnicas o de contenido, como por la reciente incorporación de vídeos de apoyo.
También eso depende mucho de la filosofía de la persona. Yo soy mujer de un solo producto, de un solo reloj, de un solo pantalón, de una sola minifalda… Y de un solo reloj.
Rebeka Smith, y de una sola neurona, por lo que se ve xD
Pues si que te admiro Rebeka Smith, a ti y todas las personas con tu filosofia de vida. Al final mientras mas cosas acumulamos a nuestro alrededor, mas preocupaciones tenemos y menos tiempo no queda disponible. Aqui en mi pais siempre veo a la gente trabajadora del campo, los llamados «guajiros» levantarse bien temprano con una sonrisa en la cara, cuando chocas con ellos por un camino siempre hay un saludo cordial aunque no te conozcan, cosa que se ha perdido en la gran ciudad. Me dan la impresión sincera de que son mas felices que nosotros con nuestra carga de cosas en nuestra agitada vida metropolitana. Son gente sencilla y de una sola lectura. Claro que hay personas permeadas por el.consumismo feroz de este mundo globalizado e hiperconectado que opinan distinto, pero no los tomeis a mal, que no son malas personas por eso, solo que estan ciegas a verdades que no se ven tan facil incluso despues de llegar a la sabiduria de los años vividos.
Buenas tardes amigos.
Me parece acertada la descripción de Javier sobre el mundo de la presentación de relojes. A veces caemos, igual que todo el mundo de las aficiones, es fácil caer en esa ansia y ansiedad de adquirir y coleccionar de todo y a por todo
Yo por suerte me contengo al máximo de mis posibilidades: un reloj al año y de precio contenido.
Pero que entiendo a todo el mundo.
Buenas tardes
No se si alguien del blog sigue la motoGP pero dejo aquí mi comentario por si no vieron el gran premio de Austria, donde el sudafricano Binden dio una clase magistral de baile sobre pista mojada arriesgando al maximo con gomas lisas. Se la jugó y ganó una carrera increible. En las categorias inferiores dos apellidos españoles ganaron en moto 2 y moto 3. Fernández y Garcia!. Una gran jornada con 2 podios para KTM. El veterano Valentino Rossi estuvo a un tilin de conseguir su podio numero 200. Pasen una buena noche amigos de América. Los de España ya en fase REM.
Mi admiración para Rebeka Smith, esa manera de pensar es la que da felicidad al ser humano. Cuando te levantas de tu cama por la mañana y sientes que tienes lo necesario, es cuando eres inmensamente rico.
Gracias por este artículo amigo Guti y gracias por los comentarios.
Es bonito ver como todos, aún pensando de forma algo diferente en lo que a relojería se refiere, es natural que tengamos diferentes gustos, diría que tenemos la madurez suficiente como para comprender a un humilde Casio al tiempo que un lujoso Formex.